Hace exactamente un año, Valentino Rossi lamentaba haber cedido la NSR 500 para pilotar la nueva RC211V de cuatro tiempos que Honda había fabricado para optar al primer título del mundo de MotoGP. Desde protecciones moto te lo contamos:
No fue hasta los últimos test de pretemporada cuando el campeón italiano reconoció el enorme potencial de su máquina para optar al título. Esa superioridad quedó rápidamente plasmada en el Mundial. Valentino volvió a ganar la corona mundial y acabó venerando una moto a la que bautizó en los primeros test invernales como ‘botijo’.
Este año, el campeón mundial ha expresado su satisfacción con la evolución que la fábrica japonesa ha hecho en la Honda RC211V. En los test de Sepang, Rossi fue capaz de rebajar en dos segundos y medio su mejor tiempo de calificación en Malasia el pasado mes de octubre y se prestó a un primer duelo directo con el que será uno de sus principales rivales este año, Max Biaggi.
«En Octubre la moto era imposible de controlar en frenada y me hacía perder mucho tiempo, tanto que me costaba rodar en 2’05» -explica Rossi-. Obviamente hacer 2’02″6 en enero significa una mejora increíble pero yo sabía que era posible lograrlo. HRC ha traído buenas soluciones, ha mejorado la frenada y el agarre y ahora la moto es mucho mejor que el año pasado. Estoy muy satisfecho con el test, más que por el tiempo, por las sensaciones con la moto. Ahora es como frenar con una moto normal y se pilota bien».
El italiano espera con impaciencia el inicio del Mundial 2003. «Creo que el campeonato de este año será fantástico. Biaggi y yo estamos muy motivados, pero también Barros, Capirossi y Kato estarán muy fuertes. Ahora, todos los mejores pilotos del mundo están en MotoGP. Habrá 20 motos de los diversos fabricantes en la parrilla, todas de 4 tiempos, y eso hará que la campaña de este año sea fantástica».