Casas prefabricadas y ahorro de costes

La construcción de las casas prefabricadas sigue en auge en el mercado nacional. Podríamos decir que la analogía de montaje es como la de un puzzle. Una casa modular está compuesta de diferentes paneles que conforman la estructura según las preferencias del cliente y bajo la supervisión de un personal perfectamente especializado y preparado.

Como norma general, los paneles que se usen como corazón y estructura de la vivienda serán recortados y preparados en origen y posteriormente ensambladas y montadas en el lugar donde vayan a ser instaladas.

Estos módulos son garantizados por el fabricante y se encuentran bajo estrictos controles de calidad, siguiendo en todo momento la normativa vigente del país o comunidad.

Los materiales utilizados para construir las casas prefabricadas suelen ser proyectado de hormigón, madera o acero, siendo los primero los que mejor resultados ofrecen. Estos materiales ofrecen un perfecto aislamiento de ruidos y temperaturas, lo que se traduce en un ahorro en la factura del gas y electricidad a final del mes.

Dichos materiales no son excluyentes, pueden combinarse perfectamente con tal de mejorar las propiedades de la vivienda en función de los requerimentos del cliente.

Este tipo de casas construidos mediante el sistema por bloque son igual de prácticas y confortables que las de ladrillo convencional.

Son muchos los organismos e instituciones que están fomentando la construcción de casas modulares desde hace varios años frente a otros métodos más agresivos. El daño estructural en caso de catástrofes de las casas prefabricadas es mínimo debido a la integración, combinación y ensamblaje de los diferentes módulos que componen la vivienda.

Si está pensando en adquirir una nueva vivienda, no dude en conocer las ventajas que ofrece este sistema constructivo, pues el ahorro que puede suponer lo convierten en muy interesante.