Una empresa de confianza

Si estás harto de tener la sensación de que te están estafando cada vez que vuelves de arreglar un problema con tu coche, tenemos la empresa perfecta para que vuelvas a recuperar la esperanza en la gente. Se trata de desguaceretosantander, una empresa de desguaces ubicada en el municipio de Marina de Cudeyo (Cantabria) que se precia ante todo de tener un compromiso ético inquebrantable, ya no solo con su clientela, sino en general en todos los aspectos de la vida cotidiana. Ello es así porque se precian con orgullo de seguir el ejemplo de Jesucristo en su quehacer diario, y en lo que respecta al trabajo ello supone tratar a la clientela con respeto, realizando un trabajo honesto y esforzado, sin medias tintas ni dobleces.

Como empresa de desguace, el servicio que presta a sus clientes es integral. Eso quiere decir que los profesionales que trabajan en ella ponen todos sus esfuerzos para que el cliente tenga que soportar las menores molestias posibles. Y ello incluye por ejemplo prestar de forma gratuita el servicio de recogida del vehículo afectado mediante la grúa, y encargarse de realizar todos los trámites necesarios desde el principio hasta el final. El cliente solo tiene que encargarse de descolgar el teléfono y hacer el encargo oportuno para que la maquinaria de la empresa se ponga en marcha.

Una vez que la empresa recepciona el vehículo, se encarga de darlo de baja ante las instancias de la DGT, de forma automática a través de Internet, gracias a la conexión telemática directa que mantienen con la Dirección General de Tráfico. Una vez resuelto el tema del papeleo, que suele ser siempre algo tedioso de resolver para cualquier persona, es cuando comienza el verdadero “manos a la obra” en las instalaciones de la empresa. Los operarios se encargan de seleccionar del vehículo aquellas piezas que juzgan que aún están en buen estado, mientras que el resto lo desechan y lo dejan clasificado o bien para llevarlo a los contenedores específicos o bien para destinarlo a chatarra. Las piezas seleccionadas por su buen estado tendrán una segunda vida gracias a la compra de otros conductores que necesiten componentes de coches a buen precio, mientras que la chatarra se podrá utilizar como materia prima de distintas industrias que necesiten de metales a un precio asequible, una vez que estos se descontaminan y se procesan de forma adecuada para su utilización con estos fines.

El resultado final es que de un vehículo roto, viejo o inservible se acaba obteniendo un claro beneficio para todas las partes. Incluso la sociedad en general nos beneficiamos de ello, ya que de esta forma se evita que acaben vertidos en el medio ambiente cantidad de residuos peligrosos.